jueves, 28 de junio de 2012

CRÍTICA A LA EXPOSICIÓN DE JOAQUÍN PEÑA-TORO EN LA SALA RUIZ LINARES DE GRANADA.

SUITE SINATRA Autor: Joaquín Peña-Toro. Título: Suite Sinatra. Lugar: Sala exposiciones Ruiz Linares. Fecha: Hasta el 14 de julio. Publicado en Ideal de Granada el día 28 de junio de 2012. Geometría plasmada en un universo cromático suave y elegante, desarrollado con ritmo constante, esplendoroso, triunfal en unos momentos e íntimo en otros. Así es el relato expuesto en la exposición Suite Sinatra por Joaquín Peña-Toro. En vaporosos dibujos, que se funden con el color, transmite la sensación aséptica inicial que comunican los hoteles como impresión primera, que va esfumándose con la permanencia, tomando mayor presencia las aprehensiones de aquellos que han ido pasando por allí. Lo transmite muy bien J.Peña-Toro en las piezas expuestas, con sencillez simulada, que esconde una compleja trama pictórica equilibrada en el dibujo, en la fuerza del tono expuesto y en la economía del trazo, consiguiendo un conjunto de poderosa dicción, libre de ornamentos innecesarios, energía depositada en el rectángulo con inteligencia, que quiere ser mágica. Desarrolla el hilo conductor del motivo que define la exposición, como si la melodía de F.Sinatra se tratara, con sus explosiones rítmicas y suave transcurrir glamuroso, que encierra una vida trepidante hecha espectáculo y que es mito ya. En esta exposición Joaquín Peña-Toro muestra como exponer una idea, que encierra lujo y miserias, fantasías y mitos, con imágenes elegantes, sosegadas y de calidad depurada, habiendo alcanzado atrapar en estas obras la esencia oculta de la imagen. Logra expresar, con estilo y clase, lo máximo en la mínima estructura, en un océano cromático de limitada variedad. Ahí está su mérito.

sábado, 16 de junio de 2012

CRÍTICA A LA EXPOSICIÓN DE CONCHA OSUNA EN LA SALA GRAN CAPITÁN

LA SALA GRAN CAPITÁN HA SIDO INUNDADA POR LA LUZ. Autora: Concha Osuna. Título:Entre miradas. Lugar: Sala de exposiciones Gran Capitán. Fecha: Haste el 17 de junio.Publicado en Ideal el día 17 de junio de 2012. La luz triunfa en su eclosión final en la retina, abriéndose en fragmentos de cromatismo irregular, para desvelar la silueta que oculta. Surgen etéreas las figuras sumergidas en el brillante océano luminoso, perfiladas, intuidas e inconclusas, siendo la percepción la encargada de concluir la imagen final, de completar la historia que empapa el ambiente. La luz triunfa en su eclosión final en la retina, abriéndose en fragmentos de cromatismo irregular, para desvelar la silueta que oculta. Surgen etéreas las figuras sumergidas en el brillante océano luminoso, perfiladas, intuidas e inconclusas, siendo la percepción la encargada de concluir la imagen final, de completar la historia que empapa el ambiente. Son los colores quien dictan el sentido de la historia que se desarrolla en las escenas representadas, transmitiendo las sensaciones que conforman el trascurso del relato expresado. Concha Osuna trabaja una técnica complicada como es la acuarela, pues es difícil superar lo expuesto por otros pintores, más el desafío constante que el blanco impoluto ejerce ante la amenaza del pincel que quiere romper su monotonía. Por eso la artista experimenta con el color, ordenándolo de acuerdo con su cromatismo, conformando un conjunto lógico que el entendimiento comprende como imagen salvada del resplandor. Los tonos producen su efecto; dorados, amarillos y ocres son asfixiantes, tórridos, agobiantes siempre. Naranjas y verdes claros expresan la vida, la sensible mirada encerrada en ese mundo luminoso. Grises, azules y violetas encierran la umbría, frescor, intimidad, regazo protector o si no el misterio que rodea la existencia del personaje. La pintora juega con el color, consiguiendo además conectar con el espectador para que participe en la construcción última de la obra, sin dejar ella de perder su influjo en la solución final. Concha Osuna ofrece en esta muestra una producción exuberante en colorido, luminosa, rica en significado y elegante en las formas, desarrolladas con un trazo rotundo, seguro, contenido, preciso y justo, para depositar la sensibilidad que la artista transmite a su obra. Excelente propuesta es la ofrecida en la Sala Gran Capitán.

LA CASA PINTADA

Autores varios. Título: La Casa Pintada en Granada. Lugar: Sala Zaida, de la Fundación Caja Rural. Fecha: Hasta el 13 de junio.Publicado en Ideal el día 12 de junio de 2012. La Sala Zaida acoge una muestra de las obras realizadas por el colectivo de artistas linarenses La Casa Pintada, que se traslada a nuestra ciudad para exponer sus propuestas plásticas. Este grupo trabaja para difundir sus obras, fomentar las actividades artísticas en Linares, crear un espacio de debate y cultura ajeno a las formas oficiales establecidas, mostrando una creatividad autogestionada. Constituye la Casa Pintada un grupo heterogéneo de artistas, por los estilos y formas compositivas sobre las que centran su atención. Los autores presentes en esta exposición son Pilar Urtiaga, Rafael Ariza, Alberto Olea, Inma G.Delgado, Flaxti, Belin, Roselló, Angel Tirado, Joaquín Alejandre, Manuel J.Padilla, Ana Núñez, José Manzanares, Calamar Dojo, Laura Gracia, Aranzana, Miguel Sheroff, Manuel Barranco, Sandra, Bea Sevilla y Toni Segura. La observación del conjunto desprende una alta calidad, que refleja la fulgurante fuerza creativa que anima a sus integrantes. Frescura, energía, sensibilidad y alto dominio técnico poseen las piezas expuestas. Todas las obras mostradas, como he dicho, contienen la huella de la habilidad artística de su autor, pero he de citar aquí aquellas que más han llamado mi atención, como las esculturas de Rafael Ariza, descarnadas, nervio hiriente, choque expresivo que abstrae la atención para seducir la mirada. Así podría definir sus composiciones. Reflexiona sobre la etereidad de la existencia, el dolor y la opresión de la realidad. Ana Núñez expone unas piezas de elegancia profunda, que derrama suavemente el color por la superficie toda para adentrarse en el mar de la sensibilidad. Pilar Urquiaga nos enseña la sólida formación pictórica que contiene, siendo sus obras ejemplo de la categoría artística del conjunto. Tiene una claridad expositiva elevada, con un dominio en la estructuración del color, que distribuye de forma equilibrada en cada pieza que concluye. En sus obras se penetra en un mundo silente, arropado por una atmósfera que encierra presentidas sorpresas. Belin ofrece trabajos en el cual refleja el alma humana, capta el misterio de la mirada, la huella de los avatares vitales en el rostro, la pátina agridulce que va depositándose tras cada instante. Todos los artistas aquí presentes nos describen el buen tono plástico que fluye en la provincia de Jaén, rotundo y poderoso, repleto de originales formas de abordar la imagen y la intensidad creadora que atesoran todos ellos.

domingo, 10 de junio de 2012

CRÍTICA A LA EXPOSICIÓN DE SEAN SCULLY EN GRANADA

LA LUZ DE LA ALAMBRA Autor: Sean Scully. Título: Luz del Sur. Lugar: Sala exposiciones del Palacio de Carlos V. Fecha: Hasta el 10 de junio. Publicado en Ideal de Granada el día 7 de junio de 2012. Sean Scully ordena la luz en su obra, la condensa, estructura, racionaliza, siendo organizada por el pulso humano que la acopla a sus latidos visuales. La luz es desestructurada en su unidad de acción, para componer con sus tonos cromáticos un conjunto lógico, sinuoso y repetitivo, sujeto al orden del pensamiento, de la proporción y espacio, calculando las medidas divinas del universo, el peso de la existencia. Así se resume el concepto plástico de S.Scully a la hora de plasmar su trabajo compositivo. Crea un espacio de topografía cromática, con sus valles, cumbres y desfiladeros abruptos, cuyo contraste produce una salmodia de tonos diversos en intensidad, que reproducen la vibración de la luz en el momento de su resplandor, de la explosión fulgurante que rompe su linealidad en fragmentos brillantes al romperse en la retina, como si una ola fuera. Este resplandor es interpretado y trascrito en cada una de las piezas expuestas, conjugándolo bajo el yugo de la racionalidad que subyace en todo lo creado. Es una fórmula que se repite sin cesar, como el eco de la palabra primera que dio soplo a la existencia. Simula de este modo la geometría arquitectónica islámica, siendo el módulo básico del fractal que se reproduce hasta el infinito. Pero el autor traslada aún más profundamente su obra hacia un estado de meditación visual, siendo cada imagen contenida en sus cuadros un mantra repetitivo. En éstos el color rebosa, bulle, se tensa en las formas geométricas donde está apresado, conviviendo, y también compitiendo, con otros cromatismos, sometidos a la ley universal. Los apila y estructura, jugando azarosamente con las múltiples composiciones que originan las posibilidades que esta ley otorga. Sean Scully transforma el estudio del color, y su comunión con la geometría, en reflexión metafísica, dotando de un áurea trascendente al estilo de vanguardia clásica que trabaja.