lunes, 23 de septiembre de 2024

F. SÁNCHEZ MONTALBÁN, MONTI, EXPONE EN CAJAGRANADA

 


EL SUSPIRO DEL TIEMPO ATRAPADO


Francisco Sánchez Montalbán, Monti, presenta “Clásica anomalía” en la Sala de Exposiciones Temporales del Centro Cultural CajaGranada. Hasta el 17 de noviembre
La fotografía recoge el instante, percepción evanescente del tiempo que muchas veces pasa invisible. Y ese es su mérito, recoger lo imprevisto, la imagen fugaz del gesto, la acción sumida en el acto temporal, el detalle desapercibido.
La mirada es ciega, pues sólo observa aquello que trasciende la rutina, lo demás queda envuelto en una realidad predeterminada, aunque la mayoría de las veces lo veraz es divergente con lo supuesto. La fotografía posibilita el conocimiento detallado del suspiro del tiempo, instante intrascendente, calderilla a la mirada, pero que en sí guarda causas, sorpresas, soluciones y enigmas de la atención encerrada en la rutina.
Francisco Sánchez Montalbán, Monti, (Cartagena, 1964) profesor de Fotografía de la Facultad de Bellas Artes de Granada, propone un conjunto de piezas, producto de su participación en el Festival de Música y Danza de Granada, recogiendo las instantáneas de los últimos veinte años. Muestra una serie de imágenes espontáneas, resultado del azar y la intuición del fotógrafo, que al convertirlas en expresión estética, por el contenido, y la inducción de reflexiones que provoca, curiosidades e historias evocadoras, son transportadas al campo de la creación plástica. Es el artista quien dirige la cámara, su inteligencia es la que elige el momento, dirigida por el ánima estética que domina la acción, el momento, cuando el autor está sumido en el universo de su influencia.
Cada una de las piezas mostradas nos enseña un detalle, una sugerencia, a partir de la cual se desarrolla la imaginación del espectador, pero en bastante de ellas es la escena quien sustrae toda explicación posible, la representación de las sombras, el movimiento, los gestos de la vida que transcurre, todo pasa y se pierde, salvo para el fotograma, convirtiéndose en punto de atención sobre la futilidad del pensamiento, pues ocurren multitud de estímulos circundantes superadores de la consciencia. Se desprende tras su visualización varias reflexiones, primando aquella que se deposita en la fragilidad de la existencia, el devenir de nuestras vidas, pues ¿somos conscientes realmente de nuestro entorno? ¿O acaso nos dejamos llevar por el flujo de la cotidianidad? suspendidos sobre las emociones y sensaciones del momento. Esta es la gran pregunta surgida en la contemplación de la obra de Monti, profundidad intelectual en el recuerdo dejado tras su contemplación, la cual toma peso y fuerza debido al contraste del blanco, oscuros y grises, en sus instantáneas.
Francisco Sánchez Montalbán ofrece en sus imágenes un paseo por la inanidad de las cosas, espacios vacíos de la comprensión, que aparecen como puertas hacia la libertad, fantasías que nacen columpiadas con las notas musicales que la escena induce, componiendo a veces paisajes de hondo lirismo visual.
Sutileza y percepción mágica se aúnan en esta propuesta plástica.









sábado, 21 de septiembre de 2024

" EL JARDÍN BESADO POR EL VIENTO " DE MIGUEL CARINI, EN LA SALA DE ARTE SANTIAGO COLLADO, DE GRANADA

 


EL ESPÍRITU DEL COLOR


El beso es portado por el viento, suave paso casi imperceptible, delicado tacto inductor de emociones que se interpretan como melodías felices, desarrolladas en tranquilas partituras y colores, que se abren en armonía en todo su espacio circundante. Brisa perfumada que toma fuerza para convertirse en ímpetu, en el momento de la caricia, sabor del recuerdo que la memoria evoca, de aquellos encuentros que arrebataron la mirada, en el éxtasis del momento trascendente, postrado ante la imagen rompedora del hilo temporal de la existencia, tal como en uno de sus escritos reflejó Jose Ángel Valente, seducido ante un paisaje luminoso.
Explico así el título que Miguel Carini ha dado a su obra última, surgida de la revelación luminosa de su estancia en el Parque Nacional del Iguazú, cuando tras un largo y tortuoso sendero a través de la selva, como si fuera un recorrido iniciático, apareció ante sus ojos la casa pétrea del escritor Horacio Quiroga. Vegetación exuberante, cromatismo salvaje sustentado en multitud de campos florales, espíritu virgen de la Naturaleza danzando en el corazón de ese lugar selvático. Esta impresión recordada ha sido origen de esta propuesta plástica.
Poco puedo decir sobre la calidad de Miguel Carini, maestro continuo, que se supera constantemente, siendo muestra de ello los monotipos que presenta en cada exposición. Quiere este creador plástico conseguir el significado último del resplandor sujeto a la imagen, intentando obtener su reflejo, como halo del eco lírico desprendido del poema. En esta ocasión deja sin palabras tras su contemplación, silencio tras la mirada, delicadeza que transcurre, descansada en el ritmo de tonalidades impresas, variadas, en conjunción ajustada a la partitura sensitiva del momento rescatado.
Las piezas de este artista penetran en el espíritu del color, navegan en su seno,  extrayendo sus esencias como fruto de su aventura plástica, para exponerlas en su forma evanescente, a pesar de la tonalidad de origen, lo cual dota de ligereza en su visualización, abriendo la mirada hacia la emoción que surge ante el paisaje sentido. Miguel Carini desliza sus trazos con sinuoso curso, plasmando con sus giros y declinaciones la modulación del relato, susurrante, poético, cuyas figuras flotan sobre el murmullo cromático organizado por el pintor. Como siempre sorprende y se supera Miguel Carini.













lunes, 16 de septiembre de 2024

NEOPOP II EN LA GALERÍA ORFILA

 


BUSCANDO LA REALIDAD LUMINOSA


Autores varios. Título: Neopop II. Lugar: Galería Orfila, Madrid. Fecha: Hasta el 28 de septiembre.

Prosigue esta galería con la muestra del arte Pop surgido en la década de los ochenta en España, movimiento artístico de gran singularidad, original, destello luminoso descubridor de nuevos senderos de creación plástica.
Surgió una inspiración caótica en esa época, fruto de un pensamiento liberado de ataduras, dirigido a la representación espontánea de la imagen pensada, intuida o soñada, y en sus casos más extremos descansada en un torbellino cromático, conclusión de estados oníricos, expresión espontánea del deseo liberador hacia una realidad luminosa, ajena al mundo gris que envolvía aquella burbuja de fiesta irreal. Mas el camino indicado por muchos, para construir ese universo, concluyó en algunos en los inicios de la lógica artística que sustenta las vanguardias, de la cual emanó el neopop, los más afortunados lograron definir estilos propios, superadores de los conceptos que le dieron vida, aunque siempre el rumor de su origen seguirá sonando en su interior.
Se propone en esta exposición la obra de Julio Alonso Yáñez, Alejandra Bonmatí, Iryna Gragera, Rosa Maroto y Carlos Merodio.
Julio Alonso Yáñez (Madrid, 1963) proyecta la representación de las posibilidades de las formas en su juego con la luz circundante, en esculturas que circulan elípticamente hacia el inicio de la vanguardia clásica del siglo XX, pero olvidada de toda idea justificativa de su creación, convirtiéndose en expresiones plásticas del pensamiento pasajero del momento, impregnado de la fantasía subyacente en la mirada.
Alejandra Bonmartí (Madrid, 1964) ofrece unas piezas de intensa atracción visual, de composición dinámica, sencillez en su color, mostrando un paisaje urbano deformado en su perspectiva, confusión del pensamiento en un entorno sometido a la fantasía personal, ejecutadas con elegancia, en la sencillez inteligente plasmada en ellas.
Iryna Gragera (Ucrania, 1974) actualmente residente en España, es quien más se mantiene dentro de la línea histórica del neopop, elaborando composiciones de fuerza directa, concisión en el relato impreso, equilibrio y sobriedad en las formas. Es directa y eficaz en la conclusión de sus obras.
Rosa Maroto (Madrid, 1966) posee una obra que resume en sí su origen y conclusión final, introduciendo tensión en su composición, al enfrentar geometría y libertad sensitiva, contraste entre orden y libertad en las formas, que apresadas en su interior muestran la realidad en que vive su pensamiento, mas en sus esculturas nos enseña la estancia feliz de la realidad aislada en su mundo intimo. Inteligente y hábil en la expresión plástica, así es el trabajo artístico de esta autora.
Carlos Merodio ofrece un conjunto de piezas que superan cualquier concepto estilístico, sin abandonar las señas de identidad del neopop, siendo sus producciones equilibradas, de limpia visualización, serenidad e imagen feliz.
Interesante propuesta mostrada por esta galería.



Alejandra Bonmartí



Alejandra Bonmartí



Carlos Merodio



Carlos Merodio



Iryna Gragera



Iryna Gragera



Julio Alonso Yáñez



Julio Alonso Yáñez



Rosa Maroto


Rosa Maroto

jueves, 12 de septiembre de 2024

EXPOSICIÓN DE FELIX DE LA CONCHA EN LA GALERÍA FERNÁNDEZ BRASO

 


EL SILENCIO LUMINOSO DE LAS HORAS


Felix de la Concha expone “Iowa” en la galería Fernández Braso, Madrid, desde el 12 de septiembre hasta el 2 de noviembre.

Busca el pintor el resplandor que subyace en el paisaje, la luz interior que sostiene su realidad, salvando la imagen de la mera reproducción fiel, fría transposición, incorporando el artista genio, vida propia, en sus vacíos y silencios presentidos, soledades empapadas de vida, aunque no sean palpables a la mirada.
Felix de la Concha (León, 1962) explora la sensación experimentada en el encuentro primero ante paisajes nuevos, extrayendo de su luminosidad el recuerdo que su presencia marcó en su memoria emotiva. El pintor lo transcribe en sus cuadros como impresiones líricas de evocaciones múltiples. Edificios y campos sumidos en el ritmo de la luz cambiante, reflejo del paso de las horas.
Felix de la Concha refleja en su obra la melancolía de la luz en la permanencia de los días. Consigue expresarlo como tránsito luminoso en la eternidad de los espacios, siendo éstos circunstancias del momento, y la claridad objeto de su mirada. Es la luz perseguida por el pintor, convertida en protagonista de la esencia contenida en el paisaje, pues es ella quien define, y sugiere, las imágenes apreciadas, aparte de influir en el estado anímico del espectador, con sus triunfos y declinaciones. Esta concordancia entre sujeto que mira y objeto ligado al ciclo diario solar, es la que define el sentido de la pieza, uniendo, a través de la claridad cambiante, al sujeto que observa y el escenario donde se desarrolla la acción temporal. Es ésta última la protagonista de todo el entramado plástico propuesto por el pintor, la cual confiere significado último a la composición, siendo la idea que mueve el objeto creativo de este artista.






martes, 10 de septiembre de 2024

LA PINTURA SUGERENTE DE JUAN CARLOS SAVATER

 

ESPERANDO AL BARQUERO


Autor: Juan Carlos Savater. Título: Un río. Lugar: Galería Leandro Navarro, Madrid. Fecha: Del 12 de septiembre al 25 de octubre de 2024.


Juan Carlos Savater (San Sebastián, 1953) ofrece un trabajo plástico de gran sugerencia visual, poderosamente singular, propuesto con rotundidad y riqueza emocional.
Este pintor extiende su acción creativa en diversos campos de la expresión artística, sea en literatura, escenografía teatral o ilustración. El motivo central de su actividad plástica descansa en espacios extraídos de la realidad, cuyas formas son entendidas en la irrealidad fantástica de los paisajes que plasma en su obra. Se adentra el artista en un mundo frío, estático, apagado a pesar de mostrar cielos azules profundos, sumido en el ardiente ocaso del horizonte, sublimado en un cromatismo sólido, y sustentado en figuras de recia presencia, impetuosas, cuasi salvaje, grávidas, en el cual aparecen formas estilizadas, ensimismadas en sus circunstancias, evadidas de su entorno consciente, en espera del tránsito hacia lo desconocido.
Traslada la imagen hacia una esquematización sujeta a la repetición rítmica, reflejo de la lógica salvada de la emoción pasional, apegada a un escenario extraño, novedad inescrutada a la mirada, que ávida de signos en el ambiente, que delate su naturaleza, explora perdida, suscitando pavor ante una soledad hundida en un entorno extraño, en espera del acontecimiento inesperado, en el abandono de una ribera olvidada, aguardando ser rescatada para pasar a la otra orilla de la eternidad.
Compone Juan Carlos Savater una obra de intensidad sensitiva, misterio en su contemplación, que rapta la mirada de la rutina temporal, para adentrarla en universos salvados de la contingencia real. Es preciso en la simbología aplicada en la descripción de sus ideas, sin necesidad de incorporar elementos innecesarios, sólo los precisos para la exposición de la imagen deseada, la cual encierra en sí un amplio abanico de respuestas, a los interrogantes que consigue despertar en el observador.