JOSEP SEGÚ EXPONE EN LA SALA PARÉS

 

LA RAZÓN QUE CONSTRUYE EL RECUERDO

Autor: Josep Segú Título: Tots els mecanismes. Lugar: Sala Parés. Fecha: Hasta el 18 de mayo.

Ofrece Josep Segú ocho obras de intenso impacto visual, perfectas, equilibradas, sometidas a la medida geométrica, diseñadas con pulcritud de líneas, reflejando la exacta visualización del paisaje urbano. La imagen de la ciudad de Nueva York aparece recogida en sus composiciones, siendo su reflejo extraído de la percepción real, para ser idealizadas según la razón construye en el recuerdo.

En el preciso dibujo de sus piezas deposita el azul celeste, fuente que derrama sus radiaciones en todo el conjunto, desvaídas, aclaradas, concentradas en unos puntos y disueltas en otros, alterado su influjo por ráfagas doradas, apariciones mágicas de brillos verdosos anaranjados, signo de la calidez solar que cuela sus luces entre la inmensidad de los edificios.

Josep Segú elabora piezas de gran realismo plástico, trasladadas al formato sostenido por la ilustración, cuya combinación crea el efecto descrito, mágico encuentro ante un escenario grandioso, soñado, mitificado en la memoria. El pintor juega en ese espacio con la luz reflejada, los equívocos que su contemplación genera, la imagen auténtica y la ficticia, sólo sostenida por la luz en los cristales de las fachadas o escaparates. Es un encuentro con un paisaje ambivalente, límite entre la presencia tangible y lo irreal, puerta de acceso hacia los campos de fantasía. Ofrece así el artista la sensación que estas urbes provocan, recuerdos felices, mundos inexplorados supuestos en la imaginación.

La realidad expresada de esta forma, atraviesa las formas sentidas para transformarse en juego cromático, siempre velado por el halo azulino de una jornada esplendorosa.

El pintor consigue elaborar óleos de gran calidad técnica, belleza primigenia, elegancia en la imagen contenida, brillo mágico que rompe la razón de la estructura lógica que la define, generando asombro en el encuentro primero de su observación, cuando se desprende en ese momento una mágica intuición.

CARMELO TRENADO EXPONE EN GRANADA

 

LOS TRÁNSITOS DE CARMELO TRENADO

Autor: Carmelo Trenado. Título: En tránsito. Lugar: Galería Ceferino Navarro y Centro Cultural Gran Capitán, Granada. Fecha: Hasta el 19 de mayo.

Es una obra de presencia rotunda, abierta a la imaginación que sobrepasa los límites de la imagen real. Ésta parece liberada, confusa, en danza caótica con figuras sin definición, laberinto geométrico en el que se difumina su apariencia, generando un rastro cromático de claridades evanescentes, que en su expansión, en el espacio acotado del cuadro, se deshacen en la confusión del vacío de los campos de colores, que se desarrollan en las verticalidades de planos superpuestos, conformando en su conjunto la complejidad de la realidad comprendida más allá de las formas y figuras, evocaciones sublimadas que fluyen en la confusión de la fantasía plástica.

Carmelo Trenado es un pintor de contrastada carrera expositiva, dominio en su oficio y destreza en la propuesta de la imagen imposible, transitoria, surgida del azar del pensamiento, cuando las resonancias de un poema, o el halo de una fantasía surgida de la impresión rememorada, marcan su impronta. El artista lo plasma con pulcritud, armonía y equilibrio geométrico, en cuyo orden se desenvuelve el flujo desordenado del capricho imaginado, que deja su rastro en la obra concluida.

Es una sinfonía pintada por Carmelo Trenado, que en la grandilocuencia de su desarrollo encierra múltiples matices solapados, sin perder cada uno su identidad, sensibilidad lírica que pasa desapercibida por el ritmo modulado, que envuelve al conjunto. El resultado es un bloque de armonías heterogéneas, que convierte la visualización de su obra en una composición de tonalidades divergentes, acompasadas por el pulso interior que incorpora el pintor.

Carmelo Trenado posee el ingenio necesario para componer piezas de calidad y amplio significado estético. Muy buena instalación la ofrecida por este artista.

LOS AZULES DE MARÍA MORENO

 

DERIVA AZUL

Autora: María Moreno. Título: Deriva azul. Lugar: Galería Taller Gravura, Málaga. Fecha: Hasta el 31 de mayo.

María Moreno es una pintora almeriense de gran vitalismo creativo. Busca y experimenta, centrada siempre en el espacio que le proporciona el impulso para crear su obra. El Cabo de Gata es la fuente de donde extrae las esencias que plasma en sus piezas. La Luz brillante, imponente claridad que imprime vitalidad a la mirada, cubierta de azul en todas sus tonalidades, azul marino, veteado de verdes, salpicado de plateados reflejos azarosos, del blanco instantáneo de las olas, más las distintas intensidades azulinas, combinadas con las difusas del cielo, conforma un conjunto rico en experiencias sensitivas, seduciendo la mirada de la artista, que envuelta en el arrebato del ambiente, elabora composiciones en las que traduce la impresión que su visión le ha producido.

Plasma María Moreno el paisaje de una forma singular, pues extrae el cromatismo ordenado apreciado en la escena, reconfigurándolo en un cinetismo estructurado, que resume la impresión presente que su encuentro, y permanencia, genera. Es una ilusión vitalista, alegre, de profunda seducción ante el espacio comprendido como espejismo al principio, pero asumida su realidad, convertida en presencia permanente, fantasía constante para la mirada, seducción feliz que sujeta al intelecto. Así es entendido por María Moreno, quien la reproduce en sus piezas, de forma desenfadada, algunas veces con pasión, siempre persiguiendo el halo sutil que fluye en el ambiente, el cual da unidad al conjunto de colores sentidos, actuando como ánima del paisaje. Es ésta la que atrapa el pensamiento consciente, y da sentido a la experiencia vivida.

La pintora comprende esta experiencia visual, transcribiéndola en sus piezas, usando veladuras superpuestas, a través de las cuales explora, con sus rayados, la profundidad de la levedad escondida en sus capas. Añade otros elementos externos, componiendo collages de gran ligereza en su contemplación.

En la ejecución de su obra, María Moreno incorpora el paisaje de los fondos marinos, no como decisión dibujada premeditadamente, sino como encuentro tras el viaje plástico iniciado, al descifrar la combinación de colores primeros depositados en el lienzo. Ella los ordena, según su concepción mágica del paisaje, pues traspasa la realidad inicial, para descubrir la esencia que sostiene el espacio del Cabo de Gata.

María Moreno es una artista de gran ingenio creativo, consiguiendo elaborar una producción plástica de poderoso peso estético y elegancia. Posee intensidad en su trabajo y ligereza en la conclusión final.

LA BELLAZA Y EL CAOS SEGÚN JAVIER ALGARRA

 

DIES IRAE

¡Será un día de ira, aquel día

en que el mundo se reduzca a cenizas,

como predijeron David y la Sibila!

(Primera estrofa del himno Dies Irae)

En la Residencia Universitaria “Corrala de Santiago” de Granada, se ofrece, con el título «Matte Painting – El instinto del caos» una exposición de fotografías transformadas en composiciones artísticas, gracias al dominio estético, y maestría técnica en su oficio, de Javier Algarra, fotógrafo con amplio recorrido en publicaciones y vida profesional.

Esta exposición sorprende por la imagen estética mostrada, ya que convierte la fotografía en auténtica expresión pictórica, sustituyendo la habilidad del pincel por la técnica digital, dominio de este instrumento en el ejercicio común de la expresión plástica. El final de todo proceso creativo culmina con la obra concluida, siendo ésta quien responde al significado artístico de su creación. En ella, si es de verdad una obra de arte, el equilibrio armónico sienta su presencia, apareciendo como espacio en el que se columpia la mirada, en ese suave vaivén de la imagen seductora, del momento del encuentro con el resquicio de la nada, vacío temporal que salva de la realidad continua, descubriendo el destello que capta la visión, atrapando el entendimiento.

Javier Algarra ofrece un trabajo de sólida estructuración plástica, de largo trayecto en su elaboración, y amplitud de registros cromáticos, conjuntados en capas aéreas algunas veces, depositados con rotundidad en otras, consiguiendo piezas que abarcan universos en su interior, composiciones visuales que a su vez comprenden infinidad de historias y sugerencias, encuentros con la irrealidad y fantasía, asombro y escape para la imaginación. Surge desasosiego en el observador tras la impresión primera de su obra, la cual no camina sola, sino acompañada del halo sensitivo de una belleza extraña, la que aparece en el ocaso, en la extinción temporal de la mirada.

Constituye la propuesta de Javier Algarra una reflexión metafísica sobre la fugacidad de la vida, la inconsistencia de su permanencia, el triunfo de la Naturaleza. Hay piezas de gran belleza e impacto contemplativo, portadoras de una acertada combinación cromática, buen gusto en la estructuración de los elementos que incorpora, inteligencia en el relato desarrollado y, sobre todo, lírica reflejada en su contenido. El caos del final es grandilocuente, como el atardecer en su esplendor, preludio del fracaso de la luz.

Javier Algarra ha conseguido crear una magnifica propuesta visual, la cual estará abierta al público hasta el 31 de mayo.

EXPOSICIÓN DE ANTONIO BELMONTE EN SANTA FE, GRANADA

 

CAMINO DE PERFECCIÓN

Es una obra singular, de poderosa dicción pictórica y originalidad estética. Presenta Antonio Belmonte, Huelva 1955, en el Instituto de América de Santa Fe, un conjunto de piezas en la que recorre el itinerario de su creación artística, entre 1974 y 2024, con el título “Camino de perfección”.

Reúne óleos y esculturas, organizando con su obra un espacio envolvente, transformado en campo de vivencias oníricas, en el que se observa el universo de fantasía y fatalidad que acompaña la existencia del ser humano.

Son sus primeras piezas pictóricas imágenes de un mundo expresado con intensidad pasional, en el que propone paisajes imposibles, construcciones que descansan en la magia, seres perdidos enfrentados a sus deseos y destinos azarosos. En sus inicios una obra valiente, sin complejos, auténtica, en el que el pintor, sobre atmósferas surgidas de la abstracción, construye sus realidades imaginarias, reflejo del sentimiento de un presente turbulento, visto con emoción descarnada. Es también un camino de evasión hacia escenas liberadoras de la rutina material, evocación espiritual de la existencia de otras posibilidades de la consciencia.

Sin abandonar el hilo argumental de la estética que rige su producción plástica, avanza Antonio Belmonte en la exploración del color, incorporando piezas de perfecta limpieza visual, en el que propone escenas de figuración con aromas de ilustración, frescas composiciones de alto impacto en su contemplación, equilibradas, que reflejan el tiempo de incomunicación, soledad, incomprensión, percibido muy bien en la impregnación psicológica que el artista logra dotar a sus personajes. Mas prosigue en la disolución de las formas, en la expresión rotunda del color, a través del cual relata la pasión desatada del momento, ahondando en la abstracción plástica. En muchas de sus obras se conjugan alegrías y tristezas, según sea el tono ofrecido en cada tramo del cuadro, esplendores y oscuridades, ligerezas y densidades, siendo las gamas excelentemente conjuntadas por el pintor, para conseguir exponer el universo sensitivo contenido en su obra. Los individuos, si aparecen, son meros elementos a punto de ser devorados por el entorno circundante.

Completa esta propuesta un conjunto de esculturas de gran expresividad, donde personaliza a los protagonistas de sus cuadros, inmersos en sus circunstancias, aquellas que les impiden salir del pozo material en el cual están sumidos.

Antonio Belmonte es un artista de gran sinceridad plástica, auténtico y personal, que logra elaborar una obra de importante significado estético.