sábado, 22 de febrero de 2014

NUEVA EXPOSICIÓN DE PEPE MOLERO


GRANDES SORPRESAS AGUARDAN

 Autor: José Molero Martín. Título: Cuadernos del agua.  Lugar: Galería Punto Rojo. Fecha: Hasta el 21 de febrero.

La imagen se difumina en las piezas expuestas, hundiéndose en la abstracción del color, siendo las formas casi imperceptibles, aunque la visión interpretada por el observador engaña a los sentidos.
El pintor presenta un trabajo diferente a lo acostumbrado en sus exposiciones anteriores, rompiendo la geometría de líneas precisas para liberar el color, acotado en la porciones del dibujo, que se escapa y extiende, anegando la superficie, combinándose con otras tonalidades, en un estanque cromático de superficie inquieta.
José Molero no se aparta de su estilo plástico, pues ahonda en el espíritu de las radiaciones luminosas, mostrando la realidad fielmente, que no consiste en el recuerdo limpio, ordenado y lógico. Lo que transcribe en el cuadro es la esencia de la imagen, la energía que brota de la pieza, la emoción del momento recordado, logrando contagiar al espectador.
Supera el dibujo para explorar en los confines de la luz, buscando el significado de su fuerza al ser percibida en la Naturaleza. Todo es cromatismo, energía transformada, amable y apacible a la mirada del pintor, que se adentra en su pulso lírico para describir la magia del ambiente, la sorpresa gozosa sentida ante la contemplación de un paisaje.
La bruma esconde la clara imagen, ocultando sus relieves, superponiéndose a los detalles, dejando sólo que la atraviese el “aroma” de la forma traducida en su comprensión.  El pintor vela la mirada con capas varias, deformando los contornos, dejando que el color, que imprime su estampa en la memoria, sea el único que consiga establecerse en la superficie del cuadro. Crea tensiones emocionales en la oposición continua de luces y sombras, organizada según un equilibrio asimétrico, representación del instante en mutación perenne.
Pepe Molero inquieta, se supera y demuestra su gran valía artística, siendo un pintor al que es interesante seguir en su trayectoria plástica. Grandes sorpresas aguardan.

 



















 

viernes, 21 de febrero de 2014

EXPOSICIÓN DE TINA HIDALGO

TODO POR UN CUADRO Autora: Tina Hidalgo. Título: Obras de Tina Hidalgo. Lugar: Colegio Oficial de Gestores Administrativos de Granada, Jaén y Almería. Fecha: Hasta finales de febrero. Una propuesta sencilla es la ofrecida en esta Sala, siendo abordado el trabajo plástico con valentía, sosiego y amabilidad, buscando la autora expresar su impulso estético bajo una mirada sensible. La componen obras de procedencia varia, por el momento de su ejecución o el tema abordado, abundando los bodegones y juegos florales, más los paisajes típicos de nuestra tierra. Posee Tina Hidalgo un dibujo personal, trascrito en lo límites de lo formal, superado por el juego del color, que al desbordarse lo cubre y mimetiza, quedando como protagonista único que da valor a la obra. Los tonos son precisos, poderosos, perfilados, donde los azulados, verdes, rosas y amarillos se despliegan en pequeñas porciones densamente engarzadas, produciendo un juego visual que simula exhuberancia. Sus paisajes poseen duende, de éxito dispar en el acabado, aunque seducen por la armonía en su confección y la fresca mirada expuesta por la pintora. En el conjunto de piezas mostradas existen obras que superan al resto, sea por el juego cromático conseguido, o también gracias a la serena belleza alcanzada. Sobre todo el bodegón de fondo azulado, limpio, que rompe el entorno para dejar unas hortalizas como imagen central, con apariencia dorada que se apaga. Es una pieza elegante. Obras como ésta hacen que la muestra de Tina Hidalgo justifique sobradamente su exhibición.

viernes, 7 de febrero de 2014

EXPOSICIÓN DE CARMEN LLORET

¡DANZAD BENDITOS! Autora: Carmen Lloret. Título: Xiala. Lugar: Palacio de la Madraza. Fecha: Hasta el 25 de febrero. La danza es la expresión física del ritmo desarrollado a través de las formas corpóreas, disueltas en la melodía seductora de la conciencia. Es la representación del torbellino armónico del sonido envolvente, que en su denso flujo impulsa los cuerpos a la descripción cinética de la musicalidad. Su escenificación contagia al espectador, que al rememorarla debe utilizar el reflejo del movimiento rítmico. Por ello ha arrebatado el genio activo de los artistas plásticos, que han buscado su plasmación en el lienzo o en volúmenes sólidos. Surge en la memoria imágenes de las obras de Matisse, con su colorido rompedor, intenso y exuberante, que recorre los sentidos para dejar grabada la melodía en el entendimiento; o la intensidad de Picasso en sus piezas danzantes, de profunda sensualidad, esquematismo y disolución en el ritmo. También la visión daliniana en sus múltiples evocaciones, misteriosas, sedosas, delicuescentes y elásticas. Carmen Lloret aborda valientemente este tema de cumbres conquistadas, produciendo una versión original , nacida de la historia clásica del arte. Posee esta artista un trazo preciso, que deshace las figuras en gruesas líneas, con la definición de su esencia en la mancha del rastro. Se van describiendo como surcos sin interrupción, cuan notas musicales, ascendiendo y retorciéndose para convertirse en éter. La melodía se difumina en el cuadro, vaporosamente, marcada por la naturaleza leve del color, que con la ingravidez cromática reproduce la insustancialidad de su contenido. Es el ánima del ejercicio, acompasado al ritmo, quien se escapa y refleja en las obras de Carmen Lloret. Gusta la delicadeza de las formas contenidas en las piezas, también por la poderosa grafía final en que desemboca su simplificación. Todo arropado con tonalidades sencillas, de apacible impacto, aderezado con la sobriedad del dibujo, que se encierra en el primitivismo. El conjunto expuesto conecta con el observador, haciéndolo cómplice en su agradable contemplación.