domingo, 26 de julio de 2015

JOSÉ CABRERA EXPONE EN LA GALERÍA CARMAR

EN EL UMBRAL DE LA BELLEZA

Autor: José Cabrera Alaminos. Título: Obras de J. Cabrera. Lugar: Galería Carmar (Almuñécar) Fecha: Hasta el 11 de agosto.

Es una sorpresa agradable descubrir la obra de José Cabrera, pintor de Almuñécar, cuyas piezas poseen un brillo de clasicismo trasladado a una visión actual. Domina el dibujo, es habilidoso en el detalle, controlando un color denso, fuerte, que imprimen peso a las figuras que deambulan por sus cuadros. Son éstas rotundas, de intensa percepción psicológica recogida en sus miradas, que relatan sus vivencias, las rutinas que absorben la existencia. El pintor recorre su entorno con una espléndida dicción plástica, plasmando los tipos que recrean la historia costumbrista del lugar.
José Cabrera es un pintor de raíz clásica, bien formado en el trazo del pincel, cuando es desplazado sobre un dibujo exacto, controlando el color en composiciones equilibradas, en escenas tranquilas sumidas en el sueño de los tiempos.
El artista puede ir mucho más allá, hacia retos de complejidad superior, explorando otros motivos distintos a los ya trillados con profusión, pues posee cualidades de sobra para destacar en el oficio pictórico, aunque puede que haya optado por afirmarse en el retrato de la mirada cotidiana, en la exaltación de la sencillez de la condición humana. Su pintura gusta, demuestra su valía, es autosuficiente, por lo que tendría justificación que así fuera. No por lo expresado aquí desmerece su obra, sino al contrario, se resalta la excelencia técnica del autor, la producción serena de magnífica conclusión artística. Posee capacidad para atravesar difíciles derroteros, hacia campos de creación diferente, que le permitan presentarse con el verdadero potencial compositivo que atesora.











miércoles, 22 de julio de 2015

EXPOSICIÓN DE C.TISCHLER EN SANTA FE (GRANADA)

ESTADO DE COLOR


Autora: Carmen Tischler. Título: Lindes al cielo. Lugar: Sala A Instituto de América de Santa Fe. Centro Damián Bayón. Fecha: Hasta el 6 de agosto.

El color surge apasionado en la configuración de la imagen, es poderosa su impronta visual, espeso y desbordante, ocultando la geometría de las formas, apareciendo los tonos depositados con fuerza grávida, dejando una representación intensa tal y como la primera impresión graba en la memoria.
Es un expresionismo abstracto el desarrollado por Carmen Tischler, evolución de una figuración ebria de cromatismo palpitante, que se expande en contraposición con otros colores oponentes.
La pintora evoca la vibración de la mirada ante un paisaje que dejó el temblor en su espíritu, preso de la emoción ante el festival lumínico de las horas vestidas de una elegante gama de azulados, rojizos, verdes, ocres y marrones, envueltas en un áurea cárdena que se presiente y escapa entre las grietas de las pinceladas. Es una sensación especial que define el alma del entorno granadino, captado por la sensibilidad de la artista. Ésta camina por la superficie de espacios cromáticos bien asentados, describiendo sus cualidades, topografía y posibilidades, sabiendo definir la frontera de su variabilidad, que organizada expresa el conjunto de la escena presentada. Es el ardor de la percepción quien habla a través de los trazos de la autora, que se queda en el éxtasis de la contemplación, sin ahondar en el interior de la luz, vestida en el vocabulario descrito por su paleta.
El resultado es una obra sólida, bien estructurada, elaborada con el corazón, que se convierte en composición artística mediante la habilidad técnica de Carmen Tischler, expuesta con sinceridad e independencia creativa, signo de un trabajo singular y de personalidad apreciada.















viernes, 17 de julio de 2015

JOSÉ PIÑAR EXPONE EN RUIZ LINARES, GRANADA

FLUJOS DE COLOR

Autor: José Piñar. Título: Poscaland. Lugar: Sala de exposiciones. Anticuarios Ruiz Linares. Fecha: Hasta el 11 de julio.

Es una expresión elegante, desenvuelta y ágil. José Piñar expresa una obra rotunda de calidad, nervio visual y trazo magnífico. Son piezas de pequeño formato, más alguna de tamaño mayor, donde se condensa el cromatismo en su intensidad pasional. La linealidad amplia y extensa se despliega en el plano de la superficie, vibrando poderosa, sometiendo los ángulos y geometría sobre la que se asienta, para trascender en flujos de tonos azarosos en apariencia, que encierran un profundo concepto, producto de una planificación reposada en el tiempo. El artista ejercita su habilidad plástica con rotuladores, convirtiendo los utensilios cotidianos, y gama reducida a colores primarios de uso industrial, a producto artístico. El resultado es una obra sosegada, reflejo del equilibrio y armonía de la composición, mantenida en el tiempo de su observación. El contraste de los tonos usados, su acertada combinación, logran producir un conjunto atractivo a la mirada, que olvida su origen de abstracción clásica para obtener una propuesta seria y de alta valía plástica. Los medios pueden ser sencillos, el estilo y técnica usada común, pero la conclusión resalta y es apreciada. Elabora una obra de Arte. José Piñar alcanza a comunicar el destello mágico de una representación cromática, serena y contenida, en un dibujo que se diluye en un combinado de color, lejos de la amalgama, bien definido, que se enriquece mutuamente en el ritmo que sus estridencias generan. Es una destreza visual la organizada por el pintor, desarrollando su paleta en tiras lineales que rompen la tonalidad del fondo. Producen las composiciones una belleza estructurada, conclusión de un lenguaje cromático inteligente en las piezas. Los colores colaboran entre sí, en una plasmación limpia y un entramado bañado, en algunas ocasiones, en el albor del cuadro, luz envolvente, destello sobre el que se asienta el engranaje de los trazos.
José Piñar muestra su inteligencia compositiva a la hora de expandir el color en el plano, ordenado, dinámico, conjuntado y de efecto seductor.







































martes, 14 de julio de 2015

PEQUEÑO FORMATO EN MILENIUM GALLERY

CALIDAD, ELEGANCIA Y ARTE

Autores varios. Título: I Exposición Colectiva de pequeño formato. Lugar: Milenium Gallery. Fecha: Hasta el 10 de septiembre.

Una acertada propuesta constituye la muestra presentada en esta galería. Veintisiete autores confluyen con sus obras para organizar un entramado diverso en temática, abordada desde estilos y formas personales de entender la figuración. Coinciden todos en el pequeño formato, en la calidad técnica de sus producciones, y en la riqueza artística expresada en cada una de ellas. El color de las piezas inunda la estancia, mezclando sus ritmos en un vendaval cromático sujeto a un dibujo preciso, que aborda la figuración desde un amplio abanico de sensibilidades. Flotan multitud de murmullos en el ambiente, diálogos múltiples que configuran la realidad de la existencia, no acoplados de manera brusca, sino armoniosa y acompasada, conjugándose en una ondulación de colores, que abaten suaves los acantilados de la retina.
Albert Sesma, observa al espectador, usando un enfoque original, tonos elegantes y fuerza en la expresión. Manuel Barahona muestra su obra singular, la mirada de la tierra, descrita con la mano veterana del artista. Barberán es magnífico, capta la luz en superficies metálicas y transparencias, mostrando piezas de calidad y magia en su ejecución. Carlos Puyet construye un trabajo sereno, espacio para la reflexión. Casado de Lucas se introduce en el paisaje desvanecido por la impronta de la luz, en soledades líricas, en busca del yo.
José María Martín, Gracia Velasco, Luis Pardo y Miguel Peidró descansan su mirada en paisajes vestidos de un amplio abanico de tonalidades, desarrollando un dibujo en equilibrio tenso con el color, o sometido a la impronta y poder espiritual de éste.
Francisco Balderas, Antonio Barahona, José Ysmer, Noemí Martín, Pablo Rubén López Sanz, Muñoz Bernardo y Leonardo Fernández, indagan sobre la belleza existente en los entornos cotidianos, en la nostalgia, vestida de recuerdo, que el tiempo construye en la memoria. Leonardo desarrolla una habilidad exquisita en la conclusión de su obra.
La propuesta de Germán Aracil es el tacto visual delicado, sus personajes en sí construyen historias que sumen al observador en el halo de la fantasía. La figura es abordada con ingenuidad, ensoñación, alegría y gusto visual por Maribel Alonso y Oscar Borrás, mientras Svetlana Kalachnik se encierra en los momentos íntimos de la vida, en una ejecución plástica gozosa.
Centran la mirada en la persona, desde composiciones y perspectivas técnicas variadas, Josep Francés, Josep Baqués y Mª. Josefa Díaz.
Luis Romero ofrece silencios nocturnos y acogedores, relajación producida en su contemplación. Y Pedro Roldán camina en su éxtasis cromático, desbordado, jubiloso, desembocando en los campos de la poesía.
Manuel Domínguez, aporta unas piezas de conclusión serena, expresando la luz y el clima, en un rumor difuso, de una escena callejera instantánea. Es su pintura evocadora del tiempo que pasa. Trigueros atrapa la realidad, en producciones que se concentra en la intensidad de la fuerza del entorno, contraste puro en la paleta usada, desarrollando un colorido sin sobresaltos sobre un fondo oscuro.

Alberto López acierta plenamente de nuevo, al definir una idea sólida que sustenta una exposición de gran nivel artístico, la figura atrapada en todas sus cualidades, describiendo el conjunto las propiedades de la realidad sentida. Es un viaje hacia la percepción de la naturaleza interna de la imagen, plasmada en la emoción de la idea creativa que induce a la elaboración del cuadro. Gustan las obras, son de calidad, variadas a las diversas sensibilidades de los observadores, logrando el galerista aunar a excelentes maestros del realismo pictórico actual, plantando cara a otros derroteros propuestos en el devenir de la creación plástica.










































lunes, 13 de julio de 2015

M.T. MARTÍN-VIVALDI EN LA GALERÍA SANTIAGO COLLADO (GRANADA)

POR LOS CAMINOS DEL COLOR

Autora: María Teresa Martín-Vivaldi. Título: Al aire de tu paso. Lugar: Galería Santiago Collado Fecha: Hasta el 31 julio. 

Ya he hablado de la obra última de María Teresa Martín-Vivaldi, en su exposición presentada en la Sala Zaida. Aparte de los óleos allí mostrados ofrece otros trabajos en la galería Santiago Collado. Aquí propone un conjunto plástico muy interesante y de alto nivel técnico, de laboriosa ejecución, donde, capa tras capa, va depositando los signos del esplendor de la Naturaleza. Su obra es de una elaboración ardua, paciente, planificada,  dejando la autora parte de la emoción suscitada en el encuentro con la escena evocada. Es una obra impresa en papel, de inmensa belleza, ligereza visual que aturde los sentidos, incapaces éstos de comprender el desbordamiento sensitivo producido por el vibrante festival cromático de las piezas expuestas.
La superficie se deshace en destellos múltiples, chispas brillantes que saltan y entrecruzan, conformando un mar bravío de cromatismo exuberante. Palpita, trasmite frescura, dinamismo y desenfado, introduciendo al espectador en las sombras y misterios del paisaje representado. Capta M.T. Vivaldi la esencia de las entrañas de la imagen, hundiendo su mirada en el color danzante, la alegría visual que en su trascurrir produce, solo o conjugado, y siempre acompasado con el éxtasis del triunfo de la vida, en un lugar de perennidad y recuerdo del pasado. 
Es un proceso de intenso trabajo el necesario para obtener cada una de las composiciones, basado en un dibujo fugaz, de potente impronta en el recuerdo, bañado en un colorido rico en verdes, azules, violetas, rojizos, ocres.... que rompe su contorno para saltar espumoso en la superficie del papel, plasmado con una técnica mixta, resultado de un dominio ingenioso del grabado.
El resultado obtenido es un conjunto de piezas de elegante factura, contemplación alegre, que encierran nuevas sugerencias en su visualización, comunicando con el espectador cada vez un diálogo diferente. Es una obra de calidad artística y excelente factura técnica, creada  con maestría, soltura  y contrastado oficio plástico.





MÚSICA Y PINTURA

UNA SINFONÍA VISUAL

Autores varios. Título: Acordes II. Lugar Sala exposiciones de la Biblioteca de Andalucía (Granada)  Hasta el 11 de julio.

La Sala es inundada por sonidos presentidos, danzas invisibles en sus elevaciones y descensos sinuosos, sobre crestas de colores ligeros o profundidades de azules y rojos, encauzadas por la geometría, desveladas en las figuraciones, depositada en la mirada.
El viento mece suave las ramas, en un vaivén acompasado con el suspiro de la Naturaleza.
Los pájaros rompe la monotonía del azul, flujo suave, alborotado por sus cantos y movimientos azarosos, que describen la melodía de la brisa antes descrita, con sus giros impulsores de una sinfonía cambiante, sujeta a un ascenso expresado por las notas representadas por las aves. Soledad Sevilla expresa magistralmente este movimiento con fotografía digital pintada. Es rotunda, poética y precisa.
Ricardo García ordena este sonido, en los graves y agudos del color, en líneas de expresión vibrante.
Simón Zabell es genial en su interpretación de la partitura cromática, ofreciendo piezas que se vacían de notas musicales, desgarrándose en su huida, para invadir el entorno, danzando libres en la estancia. Es el triunfo del movimiento ascendente, que tras la contención de Ricardo García estalla en canto de libertad.
Jaime García idea la plasmación de su efecto en el baile contagiado, que se describe como golpeteo de la batería a través de un trazo poderoso y discontinuo, producto de la orgía de la danza.
Iván Izquierdo recoge esta fuerza y la organiza en una caída suave, que desvanece su energía, para aplanarse en una cadencia tranquila, que Jesús Zurita centra en un punto condensado, continuo, en luz contenida en el rostro de su imagen, para modular el sonido a través de la repetición medida de Ángela Galindo, promesa de tensiones entrelazadas de los hilos sensitivos, que vibran en el acorde del ritmo sentido, ondulado, grave, previsor de su escape en la expansión jubilosa de Irene Sánchez Moreno, mostrando un escenario fresco, que recoge la musicalidad popular reflejada en un ambiente puro, que vuelve al canto del ave en su reclamo. Álvaro Albadalejo introduce la reiteración medida, sustento de la horda de notas que organizan la composición de la partitura pintada. Tras lo cual Joaquín Peña Toro, con la ayuda de Rubén Jordán, rompen el silencio sentido para escuchar la suavidad aterciopelada, recogida en un orden geométrico de tonos elegantes. Explota éste pasional con Pedro Graciarias, en colores intensos, brillos imaginados como efecto de su fuerza, dejando Antonio Montalvo el rescoldo de su paso, denso y visualizado, como resto del temblor emocional suscitado, en un cosmos misterioso descubierto, tras los fuegos artificiales expuestos en color por Pedro Garciarias.
Con Angela Agrela, transcurre como melodía ligera, ordenada en sus líneas y ángulos, mostrando los efectos de su vibración en la turbación del personaje de la pieza.
Estos autores, más Julio Juste, Pablo Capitán y Gerardo Delgado, consiguen desarrollar una sinfonía visual mediante una interpretación de la música, de sus acordes, desde la óptica y sensibilidad personal de cada uno de ellos. Es el comisario de la exposición, José Vallejo, quien compone la obra final, comprendida por cada espectador según su entendimiento y estado emocional.
Excelente y delicada propuesta, lujo para la visualización por la categoría de los autores, de gran peso intelectual al ser plasmada en forma de propuesta plástica.