domingo, 20 de noviembre de 2011

EXPOSICIÓN: LA FLAUTA MÁGICA

LA MAGIA DE MOZART

Autores: Carmen Navajas, Trini Navajas y Víctor Manjón. Título: La Flauta Mágica. Lugar: Museo Casa de los Tiros. Fecha: Hasta el 25 de noviembre de 2011.

La música es transcrita en imágenes y colores en esta exposición, quedando grabados los tonos acústicos en la gravedad de la diversidad cromática, para revelar el universo que se extiende en los espacios fantásticos contenidos en la obra de Mozart. Melodía sinuosa, vibrante e impactante, sometida al dictado de una armonía lógica, cubre las historias, símbolos y fantasías del autor relatando un mundo mágico que transgrede la arquitectura fría de la razón, para explorar el desván de la conciencia e introducirse en la zona oscura, misteriosa, preludio del romanticismo. Atisbos existía ya en el subconsciente artístico de la época.

Los tres pintores traducen estas ideas en sensaciones plásticas plasmadas en sus piezas, que con técnicas diferentes, como collages, encáustica, acuarelas o grafito sobre papel, penetran en el alma de la melodía para mostrar la riqueza de matices y sensaciones que encierra, expresadas en grafías visuales de figuras y colores, que penetra en el intelecto para reproducir la emoción de la audición que la composición musical suscita.

Carmen Navajas describe en su obra escenas etéreas, fulgurantes, densas en cromatismo y dinamismo intenso. Electriza la mirada y transmite la fuerza del ritmo.

Trini Navajas es profunda en la expresión cromática, presentado una obra abigarrada en el color, mantenida en un sustrato musical que se deposita en el espectador tras su audición.

Son más místicas, y misteriosas las composiciones de Carmen Navajas, complementándose con la anterior para formar un núcleo sólido que soporta la inmutabilidad pasajera de las vibraciones acústicas.

Víctor Manjón pone rostro al conjunto, limpieza, orden y raciocinio, en un dibujo homogéneo, sosegado y de hondo significado psíquico, estando los rostros en espera infinita, envueltos en un silencio agobiante, para conformar la tercera parte que compone el trío de esta propuesta artística. Pasión, misterio y razón aparecen conjugados en el trabajo de estos tres autores, que se refuerzan entre sí para demostrar el oficio plástico de cada uno.

Si tengo que elegir me gusta la frescura y desparpajo de Carmen Navajas y la claridad y dominio psicológico del dibujo de Víctor Manjón. Aunque sin embargo... la Reina de la noche de Carmen Navajas encierra un trasfondo esotérico desconcertante, inquieta al contemplarla.






VÍCTOR MANJÓN

ATARDECER FRENTE AL CABO DE GATA




GÉRGAL, SU CASTILLO Y ENTORNO. (ALMERÍA)

ENTORNO DE GÉRGAL. SIERRA DE LOS FILABRES



DESDE EL MIRADOR DEL CASTILLO



FACHADA DEL CASTILLO TORREÒN



miércoles, 16 de noviembre de 2011

AMESA Y EL MEDITERRÁNEO

Autora: Amesa. Título: La luz camina por el Mediterráneo. Lugar: Sala de exposiciones de CajaGranada en Puerta Real. Hasta el 11 de diciembre de 2011.

Amesa ofrece una obra de fuerte impacto visual, poderosa en su configuración, con un hondo significado plástico. Ha evolucionado desde la rotundidad telúrica de creaciones anteriores hacia un estilo de marcada carga cromática, consiguiendo desarrollar con el entramado de tonalidades varias un relato poético que cala en el entendimiento.
Surge la energía en la obra expuesta de un sustrato matérico organizado con vigor emocional, resultado de los instantes fugaces vividos por la autora, cuyo influjo acaricia su genio hacedor, logrando elaborar piezas de gran factura plástica.
El color deambula en cada una de las creaciones, mostrando sus posibilidades, vibrando el entorno acotado de la composición para reproducir el estado de sensación plena, que la visión gozosa de un instante mágico produce.
El agua, la tierra y el fuego de su pasión artística se unen para ser abrazados por la luz, arrancando de sus entrañas los misterios encerrados por ésta, abriéndose en todas sus posibilidades, derramándose por el entorno de la obra para asolar con su influencia la visión del cuadro.
Amesa recrea la esencia espiritual del Mediterráneo, el influjo que ejerce en los habitantes, que otorga carácter a todas sus manifestaciones culturales. Sabe interpretar el mensaje oculto que yace en el paisaje. La obra expuesta recoge todas las imágenes que el entorno explorado por la artista ofrece, plasmadas con sensibilidad, elegancia y oficio pictórico, obteniendo como resultado un trabajo de profunda valía artística.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

ARRAYAN Y SILENCIO EN LA MADRAZA

Autor: Miguel Rodríguez Acosta. Título: Arrayán y Silencio. Lugar: Palacio de la Madraza. Fecha: Hasta el 14 de diciembre.

Miguel Rodríguez Acosta muestra en esta Sala una colección de piezas de diversa técnica y sólido nervio compositivo, creadas en las décadas de los ochenta y noventa. Conforma el conjunto una serie de grabados en aguatinta y aguafuerte, dibujos en grafito o técnica mixta, collages y gouaches en papel, donde el autor plasma su realidad interior cuando es afectada por el entorno de formas y luminosidades. Esta impresión de fuerza espiritual se transforma en su pensamiento estético en profundos surcos cromáticos, en solares de colorido intenso, que traducen la esencia intuida de la materia, el poso de la imagen en el intelecto.

Expresa la emoción de la poesía, el trasfondo pasional que late en cada texto traspasado de Lorca, las sensaciones aprehendidas por el resplandor de la materia, que bebe y expulsa la luz transformada, y afectada por sus historias, para dar vida al ambiente.

Miguel Rodríguez Acosta destruye la carcasa estructural y salva la sustancia propia que sostiene la imagen, significado último de la existencia. En esta obra descrita viaja a las profundidades de la escena percibida, o idea, para descubrir la presencia intangible del halo que le da forma en la realidad, conectando y sumando a su universo a todo aquel que ose comprenderla. Su trabajo es una meditación metafísica sobre la idea de la imagen, proyectada para generar el concepto común aceptado. Viaja hacia los arcanos de la realidad para desvelar el torrente energético que consigue atrapar nuestra mirada.

Con delicadeza, seguridad y brillantez expone las sensaciones percibidas, según su mundo interior. La pintura aquí mostrada es una excelente propuesta del arte clásico del siglo xx, trabajada con maestría por Miguel Rodríguez Acosta, referente plástico de la Granada actual.

viernes, 4 de noviembre de 2011

ÓPERA GRÁFICA

Autor: Claudio Sánchez Muros. Título: Ópera gráfica. Lugar: Espacio Arrabal y Cía. Fecha: Hasta el 18 de noviembre de 2011.

Exposición homenaje al ilustrador Claudio Sánchez Muros es la que aquí comento, homenaje a una trayectoria artística sincera, creativa y fructífera, justificada por las composiciones que reclaman su valía. En su obra el autor condensa la imagen proyectada por el entorno, las aspiraciones de un futuro cambiante y las ensoñaciones que alimentaban su fantasía, cerrada y centrada en sí misma. Las ilustraciones expuestas en esta galería constituyen un conjunto simbólico de profunda significación, que encierra una crítica visión de la realidad de los setenta, repleta de esperanza liberadora que rompiera el agobiante escenario que el autor contemplaba. Realiza esta descripción con suave entonación, tranquila, de fácil contemplación, exponiendo en un espacio sosegado la perplejidad de sus personajes, que sin embargo continuaban en sus quehaceres.

En los aguafuertes mostrados el relato del artista supera la sencilla estructuración de líneas que definen el dibujo, henchido de un color profundo que da forma al contexto, trasmitiendo la espesa sensación que describe el ambiente. Esperanzas de cambio, voces que se escapan reclamando sus derechos, aparecen en la obra colgada. En algunas piezas la ensoñación del autor se recrea en un barroquismo de expresión simple. La redondez se concentra en sí misma, ajena al espacio exterior de la forma representada, sinuosa, sensual a veces, que rompe el equilibrio de la composición adquiriendo una historia oculta que le da ánima.

Habilidad superior expresada en un mensaje limpio y ligero es la solución final en cada una de las piezas aquí expuestas. Claudio Sánchez Muros define sobradamente su categoría plástica en este pequeño conjunto de su producción total, e indica el camino a seguir a muchos otros. Lástima que los reconocimientos surjan cuando son póstumos, aunque en el verdadero creador no hace falta, pues la fuerza y vida depositada en cada obra seguirá trasmitiendo su presencia.