MERCEDES LIROLA Y EL MOMENTO ATRAPADO
Autora: Mercedes Lirola. Título:
Rizoma. Lugar: MECA Mediterráneo Centro Artístico, Almería. Fecha: Hasta el
31 de marzo. Comisariada por Fernando Barrionuevo.
Persiste la artista en su labor de
atrapar las formas espontáneas, geometría en transformación
permanente, que muestran la azarosa variabilidad de las estructuras
naturales. Mercedes Lirola indaga en las posibilidades de la materia
inerte, que transforma en piezas de formación ordenada, detenidas en
el instante de su contemplación, esperando en ésta que derive hacia
una variación de su configuración, o acaso poder percibir el latido
interno, soplo de vida propio, contenido en ellas.
Esta creadora plástica otorga nervio
propio a las figuras cerámicas que concluye, ofreciendo esculturas
de perfiles caprichosos, siluetas difíciles, formas pulsantes que en
la vibración presentida generan influencias en su ambiente próximo.
Mercedes Lirola es una alquimista que
imprime halo vital a sus esculturas cerámicas, no conformándose con
la superación de la composición conseguida, o la filigrana compleja
contenida en ellas, sino que transfiere la energía dinámica
asociada al tiempo en las distintas piezas conseguidas, salvando del
olvido la imagen del instante.
Aúna su capacidad artística en el
dibujo del diseño previo de su obra, ingenioso y elegante, con la
técnica de la transformación de la materia en el fuego, que junto
al agua y aire contenido, albergan el soplo final del esfuerzo de la
escultora, que habita en el interior de cada una de sus
composiciones.
Es constante en el trabajo plástico,
inquieta en la idea novedosa que quiere plasmar en sus propuestas,
original siempre que expone, pese a la dificultad de ofrecer algo
novedoso cuando parece haberlo dicho todo.
Me acuerdo la primera vez que pude
contemplar su obra, hace años en Granada, me sorprendió por su
frescura, fuerza, desparpajo y dinamismo, ingenio expresado en
figuras casi imposibles. Desde entonces sigo su producción
artística. Con el transcurrir de los años, Mercedes Lirola consigue
nuevas perspectivas en la elaboración de su obra, abandonando la
espectacularidad del cambio perpetuo, para centrarse en el detalle
anímico que empapa y fluye en toda la pieza. Busca lo complicado en
la traslación tridimensional del dibujo pensado, proyectando la idea
fantástica en objeto sólido, siempre delicado y amenazante de
disolverse en la nada por su fragilidad contenida. Como he indicado
antes, es el detalle, el signo oportuno que surge en el momento y se
deshace en el pozo de la nada, lo que interesa a esta artista,
consiguiendo que se conviertan en vibración permanente de presencia
elegante.
Excelente instalación la ofrecida por
Mercedes Lirola.
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