LA MIRADA TRANQUILA
En la galería Artexpontáneo se
expone la obra de González Rubio (1931-2005) Los cuadros de este
pintor, e ilustrador granadino, poseen un fuerte sabor de la pintura
clásica realizada en los cincuenta y sesenta del siglo XX, donde el
color era suave, los temas frescos y amables, la técnica depurada,
con un sólido dominio del color. Incorpora bodegones de
configuración surrealista, con paisajes urbanos y algunas marinas.
En todas las piezas se observa un equilibrado concepto del color, con
un dibujo etéreo que flota sobre la superficie rizada de cromatismo
tranquilo. En sus bodegones toma fuerza la estructuración de intenso
contenido geométrico, recreando mundos oníricos de formas
caprichosas, perfectamente ordenadas en el cuadro, trascurriendo en
un espacio silencioso apartado del ritmo temporal. En sus paisajes el
pintor introduce una mirada fugaz, en la composición impresionista,
mirada que se diluye en el preciso instante de la contemplación,
como instantánea abocada a un desequilibrio presa del cinetismo,
aprehendida en ese estado por el pintor. Ésto dota a la producción
de González Rubio de un signo personal que le da carácter y
singularidad. En otras obras hunde la imagen en el pozo de la retina
para obtener el resplandor ligero de la escena. El autor ha dejado un
trabajo plástico serio, muy bien acabado, que define los gustos
artísticos de su época, mostrando una producción que muchos
pintores actuales aún presentan, pero sin la espontaneidad
incorporada por éste. Posee sosiego, sentimiento feliz de los
momentos insustanciales del pensamiento sereno. Constituye esta
instalación una excelente propuesta para rescatar del fondo de la
memoria a este artista granadino. Hasta el 8 de abril podrá ser
visitada esta exposición.
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