jueves, 28 de marzo de 2019

SOBRE LA EXPOSICIÓN DE JOSÉ A, SORIANO


CUANDO EL SENTIMIENTO SOMETE A LA RAZÓN

Autor: José A. Soriano. Título: NO VANISHING POINT ;) Lugar: Sala Ático del Palacio de los Condes de Gabia, Granada. Fecha: Hasta el 24 de marzo.

Los medios audiovisuales se han convertido en compañeros inseparables de nuestra rutina diaria, siempre están presentes, bombardeándonos continuamente con imágenes, noticias, información, cuyo exceso satura el entendimiento, hacen opacos a los espíritus ante el asombro y el dolor ajeno, relativizando la importancia de las cosas. Son imágenes, palabras, sucediéndose, perdiendo la importancia del momento ante la nueva información. Todo se convierte en sonidos y visualizaciones, quedando la razón adormecida, aflorando los sentimientos del instante sentido. Es por lo que en esta conexión digital, veloz y trepidante, no da tiempo a retomar el pensamiento, prevaleciendo la emoción que el momento suscita. En esta red de comunicación, e información, se expresan los asombros, tristezas, alegrías, incertidumbres…, a través de los emoticonos. La palabra pasa fugaz por el éter, la imagen se desfigura en el color, pastosa, sujeto a una linealidad sinuosa, no ligada a la precisión definitoria, y fija, de la idea que da forma al concepto, aliñada por aquellos tonos que la sorpresa de los hechos incluyen. Los emoticonos sustituyen al alfabeto, representan estados, sensaciones, un lenguaje amplio, pero difuso en el concepto. Las relaciones racionales se han transformado en comunicación emocional.
José A. Soriano transmite estas ideas en las piezas expuestas, mostrando en ellas el reflejo de las sensaciones que se suceden frente a las pantallas, o como respuesta al mensaje leído. Utiliza un colorido cálido, brillante, sobre un fondo tibio, que deshace las formas, fluyendo en el ambiente, surcado por las figuritas simbólicas, que indica el ánimo producido como reacción ante el significado del mensaje percibido. El creador organiza una instalación donde combina óleos, cera fría y spray sobre lienzo, con una videoproyección y un mural, donde representa un enorme emoticono. Éste preside el montaje, observando al espectador desde cualquier angulo de una Sala diáfana, en la que flotan las esencias del cromatismo contenido en en los cuadros, sumiendo al observador en el murmullo sensitivo transportado en el color, danzando las caritas en su diversidad gestual, logrando así que sea comprendido el concepto que sustenta este muestra.
José A. Soriano demuestra una gran habilidad intelectual a la hora de estructurar esta exposición, basada en el dominio de la expresión plástica.






























1 comentario:

  1. Muchísimas graias por tu texto.
    No sabía de su existencia.
    :) GRACIAS,
    José A. Soriano.

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